El siguiente texto fué escrito por Jordi Valls con motivo de la concesión del Premio Cervantes al escritor Mario Vargas Llosa, anteriormente galardonado con el Premio Príncipe de Asturias. Como constatamos que dicho escrito con el tiempo ha desaparecido de los pocos medios donde fué publicado... pensamos que es un buen momento para recuperarlo...
...que mejor ocasión que un premio Novel, por dios !!
EXCELENTISIMO SEÑOR
MARIO VARGAS LLOSA,
REAL ACADEMIA DE LA LENGUA, MADRID
Al acercarse la muerte, el reten urinario gotea y una tela brillante aparece en el ojo abierto, la boca deja de segregar saliva, la piel se reseca, el respirar roncoso se vuelve mas penoso... el estertor, es el zumbido de la muerte.
MARIO VARGAS LLOSA,
REAL ACADEMIA DE LA LENGUA, MADRID
Al acercarse la muerte, el reten urinario gotea y una tela brillante aparece en el ojo abierto, la boca deja de segregar saliva, la piel se reseca, el respirar roncoso se vuelve mas penoso... el estertor, es el zumbido de la muerte.
Cuando por fin llega el momento, los muslos se relajan espontáneamente, la mandíbula cae, el cuerpo defeca.
Todos los orificios del cadáver, heridas, cicatrices, quedan presionados en un vano intento de parar la huida de los repugnantes fluidos del cuerpo.
La cara del cadáver es característicamente gris ceniza.
Los embalsamadores empleados de pompas fúnebres saben como corregir esto, vacían toda la sangre del cuerpo y luego a través de la aguja del trocánter pompean cuidadosamente un tinte que inyecta un color natural al cadáver.
El resultado es casi milagroso, con la ayuda de dos clavijas se atornillan las encías bien juntas hasta doblar los labios, en posición de sonrisa angelical.
Esta es la imagen comercial de la muerte.
Son bien conocidos los comentarios de familiares y amigos del difunto al decir que el cadáver tiene una expresión tranquila y juvenil.
La posición tradicional del cuerpo es cara arriba con las manos cruzadas por delante. Así el muerto es fácilmente transportado al ataúd.
La descomposición empieza a las 24 horas, claro que depende del sitio y temperatura del lugar.
La primera etapa es una flaccidez primaria seguida al cabo de unas horas por el rigor mortis. los glóbulos oculares se distorsionan y pierden su color, por eso se cierran los párpados, el cuerpo empieza a oler, el amargo y rancio olor de podredumbre. El abdomen gradualmente crece y se dilata de izquierda a derecha y la piel es de un matiz verde oliva.
El algodón que servia para taponar los orificios se ha aflojado dejando escapar una descarga viscosa y virulenta por la nariz, orejas y ano. Por la hendidura de la boca babea saliva.
Este proceso de putrefacción es mas rápido cuando ocurre en el mar, cuerpos descubiertos en estas circunstancias están en estado avanzado de putrefacción a los 2-3 días. Tienen un horripilante hedor.
Al final de la primera semana el tronco del cadáver esta completamente distorsionado, el matiz verde oliva ahora sazonado por vivas supuraciones rojas de tres centímetros de diámetro.
Los ojos salen de su órbita y la lengua hinchada groseramente cuelga por fuera de la boca.
La descarga acre del cuerpo ha manchado ya lo que antes había sido un opulento lienzo del ataúd que empieza a pudrirse y desgarrarse bajo la imparable contorsión.
La cálida y jugosa atmósfera del ataúd es el perfecto ambiente para procrear el moho que penetra por los poros del cuerpo.
En un corto tiempo el cadáver es cubierto de un mucilago gris viscoso y yace hundido en la descarga marrón que mana del tejido supurante.
La verde y jaspeada piel y el grasoso purulento cabello pueden ser fácilmente despegados.
Al desintegrase el ataúd, los insectos invaden el área creando una ráfaga de agitación y actividad para terminar con su preciado y merecido trofeo.
Vagina Dentata Organ
Londres, Dic-1996. Era Vulgaris
Cyl Cultural
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