Los cuentos recogidos en este volumen revelan la rápida evolución que tuvo García Márquez en sus primeros años como escritor de ficción. De la pesada redacción e introspección desesperante de sus primeros cuentos, como “La tercera resignación” (1947) o “La otra costilla de la muerte” (1948), el autor pasará a un estilo menos cargado de adjetivos y más centrado en la narración (aprendido de sus años como periodista) en los últimos cuentos, como “La noche de los alcaravanes” (1953) y “Monólogo de Isabel viendo llover en Macondo” (1955). Además, poco a poco, el escenario de estas narraciones pasará del interior de los protagonistas a los espacios de la costa caribe, incluyendo el mítico poblado de Macondo.
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